Seguridad o libertad

Me siento humillada por las opiniones de algunos “expertos” sobre la necesidad de dejar confinadas a las personas mayores cuando se levante el estado de alarma. Y me humilla más que se utilice el argumento de su protección cuando se han abandonado a tantas personas a su suerte precisamente por su avanzada edad. No han tomado en consideración a las personas mayores que, al carecer de conocimientos informáticos, han quedado en absoluta soledad. Tampoco, al deterioro que va a sufrir su salud al no permitirles pasear. Proporcionen los entendidos datos fiables sobre la situación y que cada uno, a nivel individual y prescindiendo de su edad, decida lo que quiere hacer. Y ante el dilema de elegir entre seguridad o libertad, que prevalezca el buen criterio y la racionalidad y no se nos impongan por decreto más limitaciones de las que nuestra dignidad nos permita tolerar.

Inma Vela Pueyo. Madrid

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